LA ENSAMBLERA SE FUE DE GIRA

Santiago Lecuna, peón y delegado Línea A.

Tres ensambles musicales que organiza el Dúo La Veredita se presentaron este último fin de semana en las ciudades bonaerenses de Claromecó, Tres Arroyo y González Chávez. Se trata de los ensambles JPG, Khunpa y Confluencia. En este último participa el compañero del subte Miguel Pipi González en la armónica.

En el ensamble hay músicos profesionales, pero no hay rigidez en los roles y en los instrumentos. También hay una organización que hizo posible está gira. Cada ensamble, compuesto de entre 10 y 15 personas, tiene un delegado que junto al Dúo La Veredita y las peñas locales llevaron adelante el evento. Además, es importante el apoyo logistico de las áreas culturales de estos tres municipios. Entre los anfitriones, y junto a muchos otros, María del Centro Cultural La Casona estuvo involucrada desde el principio hasta el final de esta segunda edición del Festival Sudestada. También hay que mencionar a Cecilia Álvarez, que desde Buenos Aires dedicó su esfuerzo y su tiempo para lograr que unos 45 músicos lleven los talleres que constituyen los ensambles a distintos lugares de la provincia de Buenos Aires.

Así fue posible que el viernes se presenten en Parador Samoa, en Claromecó, el sábado en el Centro Cultural la Casona de Tres Arroyos y el domingo en la plaza de González Chávez donde fueron acompañados por chicos de la ciudad que bailaron al ritmo del repertorio popular, con preponderancia del folcklore, que los músicos interpretaron.

Cada ensamble se reúne semanalmente a practicar, unas dos horas, por separado. En ese rato personas distintas que se dedican a cosas distintas se juntan y hacen música. Confluyen. Durante el fin de semana que pasó esa relación semanal se expandió entre comidas y guitarreadas, generando una comunión entre los integrantes que es más difícil de lograr durante la semana laboral. El tiempo libre puede usarse para conocerse más, para viajar más, para emocionarse más.

La música y el tiempo libre pueden lograr encontrarse más con la gente que uno quiere encontrarse. Y el ensamble, a su vez, le da un toque a cómo se da esa relación entre sus integrantes. Como dice el Pipi: “lo que se aprende es no a la cuestión individual. No es necesario que toques todo el tema, sino que entras en una parte. No es que la guitarra se manda un punteo a lo Pappo. No hay uno que sobresalga. Más allá de que alguno sea un animal tocando, tocamos todos iguales.”

Para el que le interese: los talleres de los ensambles se dan en San Telmo. Pueden encontrarlos y comunicarse por Facebook e Instagram poniendo en el buscador @Duolaveredita. También pueden entrar al instagram del @ensambleconfluencia

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