MOCHA CELIS

POR TANO PISANI (CONDUCTOR LÍNEA “B” DEL SUBTE Y SECRETARIO DE CULTURA DE AGTSyP), KARINA NICOLETTA, (CONDUCTORA LÍNEA “A” DEL SUBTE Y SECRETARIA DE GÉNERO DE AGTSyP), Y GISELA COMMISSO (AUXILIAR DE ESTACIONES LÍNEA “E” DEL SUBTE Y MILITANTE DE LA SECRETARÍA DE GÉNERO DE AGTSyP).

En el populoso barrio de Chacarita, en un espacio ameno y cuidado y en una de las últimas semanas del mes de marzo, se acercan decenas de compañeras travestis, trans e identidades diversas para inscribirse en el Bachillerato Popular Mocha Celis.


Lleva su nombre en homenaje a una travesti tucumana que militó junto a Lohana Berkins, quien murió asesinada, en un caso aún no esclarecido y con serias dudas sobre la responsabilidad de las fuerzas policiales en ese hecho. La Mocha supo enfrentar el abuso de las fuerzas de seguridad y la violencia institucional, y no llegó a terminar el secundario. Al igual  que tantas compañeras travestis, alcanzando un promedio de vida inferior a los 40 años.Este proyecto socioeducativo surgió en el año 2011, para dar respuesta a la demanda de inclusión en el sistema educativo especialmente de la comunidad trans.
De la población de adultos trans, más del 65% no tiene el secundario completo. Esa cifra duplica la deserción escolar de la población general de la Ciudad de Buenos Aires. Es decir, los colegios tienen las puertas abiertas pero esas propuestas, por diversos motivos, son expulsivas para las personas trans.
Fue la primera escuela trans en el mundo e inspiró la creación de programas similares en Tucumán (Norte Argentino), Brasil, Costa Rica, y Chile. Fomenta la inserción laboral con talleres como Proyecto Formativo, Entrenamiento Laboral, Orientación Ocupacional y Derechos Laborales. Genera talleres de formación en oficios, y otros que aumentan la autoexpresión y el autoestima. Les estudiantes de la Mocha se convierten en productores de conocimiento y sentido.

En 2014 egresó la primera camada. Comezaron 15 compañeres formando parte del espacio educativo, y hoy tiene una matricula de más de 400.
Les compañeres del Mocha Celis expresan y denuncian al Gobierno de la Ciudad como un actor nulo ante las necesidades que el espacio tiene.
Larreta, fuera del marketing, no ha promovido políticas públicas ni medidas inclusivas en la Ciudad para dar respuesta a la realidad cotidiana de les compañeres travestis y trans, ni para el conjunto de la disidencia sexual. Una deuda histórica y pendiente, por ello cobra resignificación el trabajo colectivo llevado a cabo desde esta experiencia educativa y transformadora.
Los costos del sostenimiento cotidiano del espacio, así como los salarios de las trabajadoras sociales y psicólogxs, lo asumen lxs docentes a través de recaudaciones, eventos y aportes propios. De igual manera, su funcionamiento es íntegramente colectivo y comunitario.  Tuvimos el placer, desde la secretaria de género de AGTSyP, de estar presentes en la inscripción que se llevó adelante esta semana y poder visualizar el gran trabajo que hacen, con todos los protocolos de cuidados, un espacio cálido, organizado, militante y humano que recibe a les compañeres como corresponde, como se merecen.

Esta experiencia plantea varios temas en la educación: se pueden generar políticas focalizadas, que cuando les da la oportunidad y toman las necesidades puntuales de los sectores oprimidos elles lo toman como propio, y demuestran que pueden construir positivamente para toda la sociedad. Su director, Francisco Quiñones Cuartas, le decía a Página 12: “Cuando empezaron a llegar las compañeras en el 2011 no se planificaba más que el día a día, ahora algunos proyectos tienen otros plazos”.

Para nuestra organización sindical construir vínculo político y compartir experiencias es prioritario. Aprendemos y reafirmamos entre otras cosas que nada es imposible si las clases subalternas se organizan, que dentro de un sistema capitalista, patriarcal y heteronormativo se puede construir positivamente, y cambiar de manera colectiva la raíz de todo lo que nos oprime y subyuga.

En este sentido, debemos seguir luchando e impulsando desde distintos sectores militantes, del campo popular y feminista, que la Ley del cupo e inclusión laboral travesti trans se haga efectiva. Es urgente para esta población y una premisa para la construcción de una sociedad igualitaria e inclusiva.