CUBA: REVOLUCIÓN. China, Corea, Perón, Alemania y Guatemala. En el mundo pasaron cosas

La Revolución China tomó el poder el 1 de octubre de 1949 y rompió el equilibrio mundial, que venía de precarios acuerdos tras la Segunda Guerra Mundial. La guerra de Corea fue la primera parte de la Guerra Fría entre la Unión Soviética y los EE.UU. Tres millones de civiles de Corea del Norte fueron liquidados por las tropas norteamericanas en acciones sanguinarias entre 1950 y 1953

Una huelga en Alemania 1953 fue violentamente sofocada por las tropas soviéticas hasta aplastar la rebelión en 500 localidades. El juego estratégico de la geopolítica mundial se daba en todos los continentes. La muerte del dictador Stalin terminó de desorientar el timón de los Partidos Comunistas en todo el mundo que tuvieron orientaciones diversas desde entonces.

En América los gobiernos de Juan Domingo Perón en la Argentina, Jacobo Arbenz en Guatemala y otros tibios ensayos en el continente, como la revolución boliviana de 1952 (única de las revoluciones sociales que tuvo apoyo de los EE.UU.), quisieron sacar a sus países del atraso colonial para convertirlos en modernos y capitalistas. Arbenz fue derrocado por un golpe ejecutado por la CIA en 1954. Perón por el golpe gorila de 1955.

La clave del ascenso político del Movimiento 26 de Julio fue su plataforma programática amplia y su estilo de lucha inflexible e intransigente en la lucha contra el dictador y sus secuaces. El Partido Comunista no pudo o no quiso por la falta de una línea clara en todo el período stalinista y de Guerra Fría, cuando perdió el control de la central de trabajadores y el mayoritario apoyo popular pasó a la fuerza nacionalista más accesible: el Partido del Pueblo Cubano (Ortodoxo), que había roto con Batista y llevaba como lema “Vergüenza contra Dinero”.