Entrevista a Nahuel Levaggi: Un militante popular dirigiendo el mercado central.

POR JUAN FERENAZ, TRABAJADOR DEL TALLER CATEDRAL

Nahuel Levaggi, desde abril pasado, es presidente de la corporación del mercado central de Buenos Aires. Es miembro fundador de la unión de trabajadores de la tierra(UTT).

¿Qué es la Unión de Trabajadores de la Tierra?

Es una organización de pequeños productores que luchan por la tierra, la mejora de la vida campesina  y que tiene como horizonte un cambio social y la soberanía alimentaria. La base social de la UTT está en el sujeto quintero: 16000 familias que realizan la pequeña producción verdura y son el núcleo de la producción hortícola argentina. La unión promueve el método agroecológico en la producción alimentaria, un método sano de producción que implica un cambio integral que incluye no solo el no uso de químicos dañinos para el ambiente, los productores y los consumidores, sino que además respeta los ciclos naturales buscando una armonía con el ambiente. Así como el trabajo digno y comercio justo. Frente al modelo del agronegocio que implica no solo el uso de agroquímicos sino que toma los alimentos como mercancías y es causante de explotación, expoliación e injusticias en toda la cadena productiva.

¿Cómo evalúas tu llegada al mercado central?

Llegamos hace cuatro meses con la idea de fortalecer el rol social del mercado central, dándole un rol más importante en la política alimentaria del cual estaba corrido últimamente. Desde nuestro ingreso, lanzamos la plataforma de compromiso social de abastecimiento que es un acuerdo de precios para ayudar a paliar la crisis económica y sanitaria producto del COVID-19, buscamos garantizar el abastecimiento, la estabilidad de los precios y el acceso a frutas y verduras de buena calidad y a precios accesibles. Así como la promoción de la agroecología difundiendola y dándole lugar a los productores que trabajan con esa metodología en el mercado. y tenemos como objetivo la creación de una empresa pública de alimentos que pueda garantizar el acceso al estado la compra de alimentos de calidad y precios justos.

El mercado central de Buenos Aires es el mercado concentrador más grande del país, vital para la garantía de alimentos en el área metropolitana y no solo ella.¿ Tuvieron alguna política especial de control y cuidados por el covid-19?. 

Desde el mercado implementamos los protocolos del ministerio, pero además desarrollamos pautas internas como un programa de desinfecciones, la obligatoriedad del barbijo y publicidad promocionando los cuidados. Además se realizan operativos puntuales donde se controla la temperatura y se reparten elementos de seguridad y material informativo.

¿Crees que hay una revaloración de la importancia de la producción de alimentos  a la luz lo que está pasando por la cuarentena?

A nivel social la producción y circulación de comida sigue sin ser una cuestión importante  mientras no haya problemas de escasez o aumentos de precios. Aunque la alimentación sigue siendo un problema porque nos alimentamos mal y caro, y nos faltan políticas activas integrales sobre esta cuestión.

Los incendios provocados y el desmonte no han cesado durante la cuarentena. ¿Crees que hay un vínculo con la búsqueda de la expansión de la frontera agraria?

Sinceramente no conozco de las situaciones puntuales. Pero es la lógica con la que funcionan los modelos del agronegocio, con el arrasamiento para dar ganancia, la liquidación de las comunidades originarias y campesinas, la vida silvestre y la biodiversidad 

Cuando el presidente anunció el proyecto de expropiación de vicentin hizo uso de un concepto que las organizaciones populares levantan como bandera y que volvió en el medio del debate por el acta acuerdo por la producción de cerdos para China: La soberanía alimentaria. ¿Qué significa esto? 

La soberanía alimentaria es el derecho y la capacidad de los pueblos de elegir qué, cómo y para quién producir, así como respecto al consumo. A veces,  se pone como oposición el acceso a las divisas por parte del complejo agroalimentario contra el comercio justo y la agroecología, pero yo creo que esa relación no tiene que necesariamente ser antagónica. A la luz de los que se debate entorno a la producción de cerdos para el mercado chino queda claro que eso está en disputa, que hay que poner esto en debate, tomarlo como objeto de la política pública e integrarlo dentro de la planificación integral de una política alimentaria.